La mayoría de nuestros protocolos de salubridad se desarrollan cuando nadie está mirando, así que déjenme contrales al respecto, estoy segura de que ningún otro destino turístico al que fuiste se puede comparar.
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Puede parecer que estoy presumiendo, pero es que como tripulantes, no importa tu departamento, la higiene es una prioridad a bordo. Es un tema que nadie puede ignorar o evitar. Tal vez si estoy presumiendo en realidad, después de todo, no querría que tanto esfuerzo de mis compañeros y mío pasara desapercibido o fuera menospreciado. Lo hacemos por todos nosotros.
Ni siquiera se trata del coronavirus.
Antes de que apareciera este nuevo participante, siempre nos han tenido bajo el microscopio como "el entorno perfecto para la propagación de enfermedades contagiosas" como el norovirus (el que te hace hacer popó y vomitar, mucho). Estos virus se propagan muy fácilmente, es sólo que en tierra nunca se pueden rastrear los casos, mientras que a bordo hay una 'población' contenida, pero al final del día, si no tocas las tapas de los inodoros, como quisiera imaginar, la mayor causa de contagios es que la gente no se lava bien las manos ya que nos tocamomos la cara miles de veces al día, especialmente cuando comemos o fumamos. Y puedo decirles una cosa con seguridad, probablemente no sea la tripulación. Nosotros tenemos muchas reglas, entrenamientos y planes de prevención.
Reglas Estrictas & Entrenamientos para la Tripulación
Tenemos que lavarnos bien las manos antes de entrar en los comedores. Hay literalmente estaciones de lavado de manos en la entrada.
Pasar por los dispensers de desinfectante de manos provoca una respuesta automática en nosotros, lo hacemos, está arraigado en nosotros.
Tomamos cursos especiales y obligatorios sobre las formas en que los virus pueden propagarse.
Tenemos planes completos en caso de un brote que debemos conocer en detalle.
Se nos recuerda constantemente que podemos ser despedidos por no reportar inmediatamente síntomas como vómito o diarrea. Especialmente si nos reportamos enfermos al trabajo o a un área común.
Tenemos constantes inspecciones internas y externas donde se evalúan nuestros conocimientos de los protocolos. Nos pueden despedir por no saberlo.
Especialmente si navegamos desde puertos de EE.UU. donde no sólo recibimos inspecciones de la Guardia Costera sino también inspecciones aleatorias constantes de la U.S.P.H., ese es el Departamento de Salud Pública de EE.UU., parte del recientemente muy conocido Centro de Control de Enfermedades (C.D.C.). Tienen que ver esto para creerme, el personal de Alimentos y Bebidas necesita limpiar todos los espacios donde se manipulan alimentos hasta que brillen, he visto a los trabajadores en cuatro patas raspando la mugre de las molduras del suelo. Luego envuelven en plástico cualquier cosa que nuestras manos sucias puedan tocar hasta que todo sea inspeccionado y aprobado. Nos miden en un ranking muy estricto y he visto gente de tan alto rango como chefs ejecutivos y gerentes de alimentos y bebidas siendo despedidos por fallar en esto.
La Tripulación debe Mantener Alojamientos Seguros y Saludables
Incluso nuestras cabinas son inspeccionadas cada quince días por motivos de salud y seguridad. No se nos permite guardar comida en nuestras habitaciones y debemos mantener todo limpio e informar de cualquier moho o mala ventilación.
El aislamiento es una práctica común
Si un miembro de la tripulación o un pasajero se enferma de norovirus o de gripe, se les aísla y sus compañeros de habitación se trasladan temporalmente, se les entrega comida y el médico los revisa diariamente por teléfono. Finalmente, la cabina se desinfecta para asegurar que no haya ningún virus presente.
Nunca fui testigo de que tripulantes se contagien entre sí, yo misma tuve compañeras de cuarto con fiebre y al trasladarme nunca me contagié, ya sea por los protocolos o bien porque lo hacemos tran preventivamente que quizás la persona presente síntomas pero no tenga realmente ningún virus, ya que la tos o la diarrea y demás pueden suceder por otras razones. Más vale prevenir que lamentar!
Somos los últimos en desear que haya un brote.
Sí, incluso después de los pasajeros que pagaron tal vez cientos de dólares por éste viaje y no quieren pasar el resto de sus vacaciones confinados a sus camarotes con un guardia afuera. Por el simple hecho de que esto significa un montó de trabajo extra para todos, teniendo que asistir en mantener el ambiente saludable, no es sólo un trabajo del personal de limpieza. Si se reporta un cierto número de casos en un crucero, estamos obligados a desinfectar todas las superficies de contacto como manijas, mostradores y ascensores varias veces cada hora, con dos productos químicos diferentes que tenemos que dejar secar en el medio. Es tedioso. Y recién estoy empezando.
Todo esto es parte de nuestro Plan de Prevención de Brotes,
como lo llamamos en Royal Caribbean.
Una vez terminado el crucero, todos se van a casa, pero para nosotros, si hubo casos reportados en un viaje, nuestra casa flotante podría estar aún en riesgo, y los siguientes pasajeros en abordar también. Debemos realizar una higienización de arriba a abajo en las áreas comunes, literalmente, limpiamos no sólo los mostradores sino también las paredes y cualquier cosa que esté a nuestro alcance, tenemos máquinas de vapor que usamos para rociar con qúimicos el teatro y otras áreas. Lo cual seguiremos haciendo durante todo el crucero entre los espectáculos y por la noche. Todo por sobre nuestros turnos de trabajo de 10 horas o más al día.
Los huéspedes nunca llegan a ver nada de esto, por supuesto, ya que o bien se bajaron en puerto, o están dormidos, o acaban de bajar del barco o ni siquiera han subido a bordo todavía.
Ni siquiera llegué a la peor parte todavía. Si tenemos varios casos confirmados y situaciones especialmente desagradables, tenemos que desinfectar completamente los camarotes de los afectados, estamos hablando a veces de familias enteras que pasaron días encerradas y usando un mismo baño con vómitos y diarrea, y hombre, a veces llaman a cualquiera para ayudar. ¡Como yo! ¡Al menos me valió una nominación de Empleada del Mes!
Tuve que usar un traje completo de seguridad, máscaras, guantes, incluso cubre-pies, mientras bajábamos por los pasillos infectados con mis compañeros y un carro lleno de suministros, teníamos que sacar todas las sábanas y toallas (sin pensar de qué podrían están manchadas) y ponerlas en bolsas especiales, así como sacar la basura, teniendo que cambiar nuestro equipo de protección habitación tras habitación para evitar llevar el virus fuera. Sin ningún conocimiento especial de limpieza, así pasamos la mitad del día, exhaustos y finalmente ir a nuestras cabinas a bañarnos inmediatamente y poner nuestra ropa a lavar, para volver a trabajar inmediatamente,al menos por suerte ninguno de nosotros se enfermó!
Incidentes en Areas Públicas
En el Lugar Equivocado, en el Momento Equivocado
Hago una nota especial para hablar de ese momento cuando un cliente vomita en un area pública, mala suerte para el tripulante que se encuentre ahí en ese momento... también tuve el gusto de ser protagonista en una oportunidad. En general es por un malestar común como ebriedad, resaca o el clásico mareo. Pero como dijimos antes, la prevención es clave, tenemos que detener al pasajero y pedirle sus datos para que los médicos puedan hacer el seguimiento, el protocolo indica que deben reportarse al centro médico y estar bajo observación. Pero pueden imaginarse que no es una conversación que alguien borracho o sintiéndose mal quiera tener con uno. A demás no importa a donde ibas o qué tenías que hacer, ahora es tu responsabilidad, a demás de contener al pasajero, cerrar el area, detener a otros pasajeros que pasen por el area y reportarlo a limpieza y seguridad. Si vas al trabajo hay que reportarle al jefe que vas a llegar tarde, lo cual a veces es caótico y si ibas a un descanso, adiós descanso. El area se cierra y un equipo especial viene con sus quimicos y máquinas especiales a encargarse del problema. Pero a mi me pasó en medio de la entrada de un bar en plena fiesta, no importa cuanto gritaba o cuántos obstáculos intenté poner, no pude evitar que muchos pisaran el vómito de la señora que, a demás, escapó del lugar del hecho como si nada, increíble.
Lo creas o no
¡puede ir aún más lejos!
Es como una historia que le dicen a los niños para que se comporten, si tenemos que ir a los procedimientos de nivel 3... ya vas a ver! La higienización debe realizarse cada 15 minutos en todas las superficies, ¿te imaginas? Los productos químicos ni siquiera se llegan a secar y lo estás limpiando de nuevo. Los pasajeros ahora tienen que ser servidos en el buffet, se requiere ayuda extra, así que podrías tener un bailarín sirviéndote la sopa y un guía de excursión en un traje de limpieza desinfectando algún lugar.
Ahora ves por qué insistimos con tantas estaciones de desinfección de manos cada dos pasos y te rogamos que te laves las manos antes de comer, ¡todos estas tu parte!
A estas alturas estoy segura de que se dan cuenta de que algunos de estos protocolos no están muy lejos de lo que podríamos necesitar implementar en tiempos de coronavirus. Tenemos el buffet cubierto y el lavado de manos también, todos los protocolos de limpieza aplican también, sólo hay que agregar la distancia social y las máscaras.
Por tantas reglas no sólo los huéspedes pueden estar reacios a volver en las primeras etapas, los marinos también tienen sentimientos encontrados similares. >Lea sobre las condiciones de regreso de la tripulación y sus opiniones.<
Volviendo a mi punto inicial, ningún otro lugar de vacaciones se somete a tal escrutinio e inspecciones hacia sus instalaciones y trabajadores como los cruceros.
Efecto burbuja de viaje
Ninguna otra experiencia vacacional tiene los medios para proporcionar un ambiente completamente hermético como a bordo de un crucero, donde todos son chequeados y están aislados, pasajeros y trabajadores por igual, sin ir y venir durante la duración del viaje; incluso con las excursiones reguladas en puerto como las que los invitados del MSC están obligados a tomar ahora mismo si quieren bajar del barco. Además de la disponibilidad de la más moderna tecnología sin contacto como las pulseras electrónicas que funcionan como método de pago y como llave de la habitación y aplicaciones que permiten reservar espectáculos, restaurantes, excursiones e incluso contactar con los servicios de atención al cliente sin encontrarte con nadie. Sin mencionar la recientemente anunciada iniciativa Muster 2.0 de Royal Caribean que ya no requerirá que los pasajeros se aglomeren en sus estaciones de reunión para el simulacro de seguridad previo a la partida, sino que hará que la información de emergencia esté disponible en los televisores inteligentes y en la App.
Espero que te sientas refrescado después de toda esta charla reluciente y que tengas un nuevo aprecio por el chico o chica "washy washy" fuera del buffet pidiéndote que uses el alcohol en gel. ¡Gracias por leer y por lavarte las manos!
Siempre Curiosos!
Extra Photos: USA Today / Fox News / NBC News / Cruise Advice / Cruise Laws News / DFW Child / Let the Fun Begin
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